El término Descentralización pareciera estar “de moda” por todo el auge que ha tenido la web3 en estos últimos años, en el concepto más general se refiere a la forma en la que los usuarios y builders de las diferentes redes desempeñan un papel fundamental en el funcionamiento y mantenimiento de estas mismas, eliminando la necesidad de intermediarios centralizados (bancos, corporaciones o gobiernos).
Los sistemas descentralizados están estructurados en redes de nodos distribuidos que verifican y confirman transacciones de manera colectiva, lo que garantiza la integridad de los datos y la confianza en el sistema sin requerir una autoridad central.
Gracias a Octant. Un experimento de financiación participativa de bienes públicos, utilizando el token ERC-20 nativo de Golem, GLM.
La descentralización se logra mediante tecnologías de cadena de bloques (blockchain) y contratos inteligentes, que crean registros inmutables y permiten que los usuarios interactúen y realicen transacciones de forma directa y transparente.
Basado en la premisa anterior, lo más probable es que hayas leído o escuchado que la web3 a través de la descentralización es la revolución de internet que busca devolver a los usuarios el control sobre sus datos, su identidad digital y tener el control absoluto de sus activos en un entorno donde las transacciones y los contratos están diseñados para operar de manera segura y autónoma.
Ahora bien, pensando un poco con la cabeza fría, entendemos que la esencia de la descentralización por ende es, devolver el control, brindar privacidad y proveer anonimato a los usuarios de estas tecnologías, pero… realmente ¿cuando fuimos dueños de nuestros datos, cuando tuvimos control de nuestra identidad digital?
Entonces, ¿es realmente una vía hacia la libertad digital, una forma de libre albedrío, o simplemente una utopía inalcanzable?
Antes de responder esa pregunta, estudiemos y analicemos ciertos puntos importantes. Comenzando por la importancia de la descentralización como principio fundamental y clave de la web3, ya que transforma radicalmente la forma en que los usuarios interactúan en internet. En lugar de depender de plataformas centralizadas que controlan los datos y las transacciones, la web3 permite que las personas sean dueñas de sus propios datos, participen en la gobernanza de proyectos y tengan control total sobre sus activos digitales.
Y, ¿cómo las personas que le dan vida y forman parte del ecosistema web3 interactúan diferente, si al final siguen navegando en internet?. Los detalles clave en cómo interactúan los usuarios en internet representan un cambio profundo en comparación con las diferentes webs. Veamos un resumen sencillo de ello:
La Web1 fue la primera fase de internet, conocida como la web “estática”. En esta etapa, los sitios web eran principalmente páginas de solo lectura, donde los usuarios solo podían consumir contenido (leer artículos, ver imágenes) sin interactuar. No había redes sociales ni posibilidad de crear contenido propio. Por el contrario en las siguientes versiones tenemos dinamismo, a continuación les presento una comparación de los aspectos más relevantes de la web2 y web3.
Aspecto | Web2 | Web3 |
Identidad y Autenticación | Basada en datos personales (correo, usuario, contraseña) almacenados en servidores centralizados | La wallet del usuario actúa como identidad, permitiendo interactuar sin compartir datos personales |
Propiedad de Activos Digitales | Los activos digitales son propiedad de las plataformas; los usuarios solo tienen derecho de uso | Los usuarios poseen activos digitales mediante tokens o NFTs en su wallet, permitiendo transferir, vender o intercambiar sin depender de una plataforma |
Interacción con Protocolos | Interacción mediada por plataformas centralizadas (redes sociales, bancos) | Interacción directa con protocolos descentralizados (DeFi, DAOs, NFTs) sin intermediarios; el usuario conecta su wallet y realiza transacciones directamente en blockchain |
Gobernanza y Toma de Decisiones | Decisiones y políticas controladas exclusivamente por la empresa | Los usuarios participan en la gobernanza descentralizada mediante DAOs, votando en decisiones importantes |
Privacidad y Control de Datos | Datos personales son recopilados y almacenados por plataformas, usados para publicidad o vendidos a terceros | Mayor control sobre datos; la autenticación con wallets permite interactuar sin almacenar o compartir datos personales; sistemas de identidad auto-soberana evitan la exposición innecesaria de información |
Transparencia y Confianza en el Código | Los usuarios deben confiar en la buena fe de las empresas, ya que el código no siempre es transparente | La mayoría de los proyectos son de código abierto, ejecutan contratos inteligentes en blockchain y permiten a cualquiera revisar el código |
Teniendo más claridad sobre la descentralización, es importante conocer un poco de su historia y como hoy día está presente en nuestras vidas. La descentralización nace con sistemas de gobierno de la antigüedad que buscaban distribuir el poder y la toma de decisiones para repartir autoridad. En el ámbito digital, la descentralización tomó impulso con el surgimiento de redes P2P (peer-to-peer) en los años 90, como Napster y BitTorrent, que permitiendo compartir archivos sin un servidor central.
La llegada de Bitcoin en 2008 marcó un hito, al introducir una moneda digital descentralizada basada en blockchain, que eliminó la necesidad de intermediarios financieros. Este avance inspiró la creación de Ethereum y otros protocolos de blockchain que permitieron construir aplicaciones descentralizadas, como finanzas, gobernanza (DAOs), y redes sociales sin depender de empresas o gobiernos.
Hoy, la descentralización es fundamental para la web3, ya que promueve un internet más democrático e inclusivo, donde los usuarios tienen control sobre sus datos y activos digitales. Y es con esta premisa que debemos conocer y entender que existen tipos de descentralización:
Descentralización de datos: Los datos están distribuidos en redes sin depender de un servidor central único, lo que mejora la resistencia a fallos. Ejemplos: IPFS, Filecoin.
Descentralización de la infraestructura: La red opera sin puntos únicos de fallo, distribuyendo nodos de forma que sea más segura y resistente. Ejemplo: blockchains públicas.
Descentralización de la gobernanza: Las decisiones se toman de forma colectiva, dando literalmente voz y voto a los usuarios sobre el rumbo de la plataforma o protocolo. Ejemplo: DAOs.
Y todo esto a su vez, también se cataloga en niveles:
Totalmente centralizado: Un único punto de control o autoridad.
Semi-descentralizado: Los sistemas tienen puntos de descentralización pero mantienen ciertos aspectos centralizados. Ejemplo: Exchanges cripto centralizados que permiten el intercambio de activos descentralizados.
Totalmente descentralizado: No hay un punto único de control, y la red depende de nodos distribuidos. Ejemplo: Bitcoin, DAOs.
Luego de tener conocimiento de esta información básica, ahora si vamos con la pregunta inicial, la descentralización es ¿libertad digital, libre albedrío o utopía? y ¿por qué tanto énfasis en eso?. Acá les quiero compartir mi pov.
La descentralización empodera a los individuos al proporcionar control total sobre sus datos y activos, reduciendo la dependencia de empresas o gobiernos y eso ciertamente otorga libertad digital. Esto a simple vista se ve genial, y aquí va el primer perooo… teniendo libertad digital y anonimato, que impide que ciertas personas comentan actos que perjudiquen a otros, es decir, estafas (como los sistemas Ponzis, scams), hackeos (donde pueden robar fondos/activos), entre otras cosas; y si, ya a estas alturas tenemos entes regulatorios, pero regulatorios para sistemas centralizados. Entonces, ¿qué pasa cuando somos víctimas de estafas o hackeos, a quién le reclamamos y peor aún, a quien le pedimos ayuda para solventar?
Por otro lado, la descentralización al mismo tiempo permite a los usuarios elegir sus propias normas y participar en la toma de decisiones, como en el caso de la gobernanza de las DAOs, perooo (2do pero) realmente en las DAOs estamos en presencia de un nivel totalmente descentralizado? Si bien es cierto los proyectos tienen sus tokenomics y son públicos, también existen las llamadas ballenas (personas que poseen muchos tokens del proyecto), muchas veces dichas ballenas son los Founders del proyecto y esto indiscutiblemente influye en la toma de decisiones, entonces ¿cómo mantener la propuesta de valor de la DAO sin caer en que sea un sistema gestionado por sus Founders (centralización disfrazada), ó como prevenir y evitar que las decisiones de la comunidad no hunda el proyecto? Complejo cierto, de solo pensarlo solo imagino a ciudad Gótica durante el caos, un libre albedrío total.
Entonces lo ideal de la descentralización en web3 sería tener un internet donde las personas sean dueñas de sus datos y activos, al mismo tiempo eso les ofrece privacidad y anonimato, pero cuando suceda algo que se escape de mis manos y sea única y exclusivamente mi responsabilidad, ¿acudo al departamento legal y de justicia DEX? Esto en definitiva solo tiene un nombre y es Utopía.
Sin duda alguna este tema es todo un dilema, y pensando justamente en ese dilema he reflexionado lo siguiente, y empiezo por hacer mención de la frase cliché “estamos early” y si, bastante early, solo piénsalo así, aún no se solventa el trilema de la blockchain, queda mucho por trabajar, construir, iterar y desarrollar.
Es imperativo tener en mente y considerar contar con servicios híbridos, a veces es necesario recurrir a empresas centralizadas que ofrezcan soporte o soluciones en entornos descentralizados. Por ejemplo: plataformas que combinan gobernanza descentralizada con servicios de soporte centralizado. Otra opción sería tener proyectos con enfoque emergentes, los cuales aborden estos temas con soporte comunitario, seguros descentralizados o nuevas capas de solución en blockchain (como soluciones de recuperación de llaves y fondos).
Quizás son ideas locas o visión de un futuro que está en construcción, por los momentos sabemos que la descentralización es, en esencia, el pilar que define la visión de la web3 como un entorno libre y autónomo, donde el poder y el control digital están en nuestra manos, distribuidos entre nosotros mismos los usuarios. Es un cambio revolucionario en cómo concebimos la estructura de internet.
Al final del día, la descentralización para nosotros los ciudadanos de web3 forma parte del presente en esta era digital con un potencial realmente enorme y viable para todos los aspectos, ya tenemos muchas ventajas, y también desafíos a superar. Por los momentos pienso que la web2 y la web3 van y seguirán por un buen tiempo de la mano, la combinación de ciertas características serán el punto de inflexión que van a determinar el camino del desarrollo y la evolución del internet con beneficios de propiedad pero que exige asumir una gran responsabilidad y gestión de riesgos asociados.
¿Y tú qué piensas sobre la descentralización? ¿Es el milagro del siglo XXI, una oportunidad para tomar conciencia de nuestra presencia digital o se te hace difícil creer en este sistema?
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